Relación microbiota y cerebro. ¿Cómo "alimentamos" una buena salud integral?

25/6/2024

¿Qué es la salud integrativa?

La salud integrativa abarca un enfoque holístico que combina prácticas médicas convencionales y complementarias para tratar a la persona en su totalidad en lugar de centrarnos en solo síntomas específicos.

De esta manera, interesa conocer qué alimentos pueden influir de manera positiva entre la conexión microbiota y cerebro. La microbiota intestinal influye en la salud cerebral y ciertos alimentos apoyan esta interacción hacia un bienestar general. 

Es la microbiota intestinal el conjunto de microorganismos (bacterias, virus, hongos y otros microbios) que viven en el tracto gastrointestinal, cruciales no solo para la digestión y la síntesis de vitaminas, sino también para la regulación del sistema inmunológico, de numerosas funciones fisiológicas y la protección contra patógenos.

Dado el papel que ocupa en nuestra salud y la relación directa con nuestro equilibrio, debemos tener un cuidado y una protección especial para mejorar nuestra calidad de vida.

¿Qué hacemos bien y qué hacemos mal?

Eje (conexión) Intestino-Cerebro

Una relación cada vez más conocida que nos puede dar muchas respuestas es éste eje que se explica como una compleja red bidireccional que conecta el sistema nervioso central con el tracto gastrointestinal. 

La comunicación entre el intestino y el cerebro se realiza a través de varias vías, incluidas las señales nerviosas, algunos metabolitos microbianos y el sistema inmunológico.

1. Vía Nerviosa: El nervio vago es una ruta principal de comunicación, transportando señales desde el intestino hasta el cerebro.

2. Metabolitos Microbianos: Los productos de fermentación, como los ácidos grasos de cadena corta (AGCC) y neurotransmisores como la serotonina, producidos por la microbiota, pueden influir en la función cerebral.

3. Sistema Inmunológico: La microbiota modula la respuesta inmune, que a su vez puede afectar la neuroinflamación y el funcionamiento cerebral.

Alimentos que Favorecen la Relación Microbiota-Cerebro

Para mantener un equilibrio saludable de la microbiota intestinal y favorecer una buena relación con el cerebro, se recomienda consumir una dieta rica en prebióticos. probióticos, ácidos grasos Omega-3, polifenoles, vitaminas y minerales.

1. Prebióticos: La fibra dietética ayuda al crecimiento de bacterias beneficiosas y la encontramos en plátanos, espárragos, ajo, cebolla, alcachofas, puerros... 
2. Probióticos:

   En alimentos fermentados que contienen bacterias vivas que pueden repoblar la microbiota intestinal. Así, los encontramos en yogur, kéfir, chucrut, kimchi, miso, temphe...

3. Ácidos Grasos Omega-3:

   Son antiinflamatorios naturales que han demostrado reduir la inflamación y mejorar la funcion cerebral. Se encuentran en pescados grasos (salmón, sardinas...), nueces, semillas de chía...

4. Polifenoles:

   Son Antioxidantes y Antiinflamatorios: Pueden beneficiar tanto al cerebro como a la microbiota. En frutas, verduras, té verde, cacao y vino tinto.

5. Vitaminas y Minerales:

   B12 y Folato: Esenciales para la función cerebral y pueden estar influidos por la microbiota. En carnes, huevos, legumbres y verduras de hoja verde

    

La ansiedad, la depresión y otros transtornos en el estado de ánimo pueden estar relacionados con el desequilibrio de la microbiota (disbiosis), pueden asociarse con una mala salud de nuestra microbiota.

El impacto de los probióticos en la SaludMental:

Un metaanálisis en el año 2024 ("Influencia del consumo de probióticos en los transtornos depresivos") concluyó que la suplementación con probióticos tiene efectos positivos sobre la reducción de síntomas de ansiedad y depresión en adultos. 

Enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer también podrían prevenirsecon una microbiota equilibrada.

Redactado en el año 2021 ("Documento de consenso sobre la microbiota y el uso de probióticos/prebióticos en patologías neurológicas y psiquiátricas") ha mostrado que ciertos metabolitos microbianos pueden reducir la neuroinflamación, un factor clave en la prevención de trastornos neurodegenerativos.

Nuestra Dieta Mediterránea, ("Dieta Mediterránea y prevención de la depresión recurrente") rica en fibra y grasas saludables y una microbiota diversificada, está asociada con un menor riesgo de depresión y una mejor función cognitiva, según un estudio sobre Dieta y Microbiótica (2022).

El cerebro y el intestino se encuentran interconectados con una intensidad que nos permite afrontar los problemas asociados tradicionalmente a la ciencia psiquiátrica o psicológica desde una perspectiva completamente innovadora y complementaria.

Sílvia Pellicer Bertrand

L. Ciencias económicas y empresariales (UAB)

Especialización en Nutrición y Alimentación en Patologías de Gran Prevalencia (UOC)

Máster Universitario en Nutrición y Salud (UOC)

Miembro correspondiente con nº AEND03407 de la Academia Española de Nutrición y Dietética